Cómo comentábamos hace unos días, Intel confesó que tenía ciertos problemas de estabilidad con los puertos USB 3.0 en su nueva arquitectura Haswell. Intel afirma que está trabajando en la solución.

Desafortunadamente no se puede corregir con alguna actualización de software, por lo que Intel deberá sacar una nueva revisión de su Chipset. Los partners de Intel que se dedican a desarrollar las placas madres (Asus, GB, MSI, etc) afirman que este defecto no es tan grave dado a que no retrasará el lanzamiento de Haswell de Junio. Lo más seguro es que para la Computex veamos placas madres con los arreglos pertinentes.

Recordemos que este bug afecta a los puertos USB 3.0 cuando un equipo reanuda sus operaciones desde un estado S3. No es algo crítico, pero en Intel se preocupan por entregar soluciones integrales y estos desperfectos son inadmisibles. Recordemos que este es el segundo problema que Intel tiene en sus chipset en un periodo de 12 meses.

Fuente: Fudzilla