La nueva generación de gráficas AMD tendría un potente y nuevo sistema “apilado” de memoria, la que le daría un gigantesco salto de rendimiento, pero también la limitaría a sólo 4GB de capacidad. Esto se solucionaría con la segunda generación HBM (High Bandwidth Memory), permitiendo versiones de 8GB más acordes a las altas exigencias en resoluciones que experimenta el mercado.

AMD espera lanzar pronto su nueva generación de gráficas Radeon serie comercial R9 300. Con ella espera actualizar su oferta para el nicho high end y de paso tener una solución más poderosa de lo que hoy ofrece NVIDIA con su GTX 980. Y esto tiene argumentos para serlo, ya que mucho se habla de que la nueva arquitectura integraría nada menos que 4096 unidades de procesamiento gráfico o más conocidos como “stream processors“. Pero lo más novedoso de la nueva arquitectura sería la integración de la nueva tecnología HBM de memorias “apiladas” ¿Que significa esto? Pues que el GPU tendrá a su lado, y no esparcidos por el PCB, módulos de memoria vRAM “apilados”. Con apilados nos referimos a que los módulos usaran laminas, una encima de otra, conformando la capacidad de la memoria. Esto trae una gran cantidad de beneficios pasando por una mayor capacidad de transferencia de datos, mayor densidad de memorias, ocupar menos espacio y mejorando la eficiencia energética. Sin duda un tremendo avance, el que combinado a la nueva arquitectura gráfica del GPU, podrá alcanzar un rendimiento excepcional para altas resoluciones.

HBM mejoras

Las nuevas memorias apiladas estarán organizadas de la siguiente forma. La primera generación de esta tecnología esta conformada por 4 módulos, los cuales se agrupan en 4 memorias de 256 MB, apiladas una arriba de otra. Por ello tenemos 1 GB por módulo los que en su total forman 4 GB. Por otro lado, cada módulo tiene una interfase de 1024-bit con un 1Gb/s. Esto resulta en un ancho de banda de 128 GB/s, el cual crece a 512 GB/s con los cuatro módulos, cuando los chips de memoria trabajan a 1.000 MHz. Pero Fiji XT vendría con memorias trabajando a 1.25 GHz, lo que resulta en 640 GB/s. Con esta nueva tecnología la nueva R9 390X “Fiji XT” alcanzaría un ancho de banda nunca antes visto. Como referencia la GTX 980 tiene un ancho de banda de 224GB/s, mientras que una Titan Back tiene 336 GB/s.

Ahora ¿por que el limite de 4 GB? El nuevo GPU de AMD será grande, el más grande de AMD fabricado hasta la fecha. Y tiene lógica pensando que se esperan aumentar las unidades de procesamiento (con un posible re-ordenamiento de la arquitectura), sin bajar “nanometraje” de fabricación, el cual se mantendrá en los actuales 28 nm. Como este GPU ocupará mucho espacio, integrar más memoria alrededor del chip no será viable.

Recordemos que hay dos formas de integrar al GPU memorias apiladas HBM. Una es la llamada 2.5D y la otra es la 3D. La primera es la que usará AMD (y NVIDIA con sus próximos GPUs), donde la memoria apilada se coloca alrededor del GPU en una base llamada “interposer“, la que funciona como intercomunicador de la memoria y el GPU, dándole una alta velocidad de transferencia de datos. La 3D es un poco más difícil de lograr, por lo menos para chips gráficos de alta potencia. En ella se coloca la memoria apilada sobre el GPU de manera vertical. Con ello se logran chips más reducidos en su totalidad y con mejoras en el consumo energético. Por ello esta técnica será usada en chips de bajo voltaje o que requieran agrupar el menor consumo posible.

 

2.5D y 3.0D HBM

 

La opción para el nuevo GPU de AMD de integrar más memoria sería adherir más memoria, pero como les comentábamos, el chip gráfico será muy grande. Además las memorias uasarán una interfase de 1024-bit  conformando 4096-bit, más que suficientes para el GPU de AMD. Si existiera la posibilidad de adherir más módulos, pasando de 4 a 8, sería una perdida de rendimiento, ya que las memorias llegarían hasta la friolera de 8192-bit, algo inútil para el GPU de AMD, el cual sólo aprovecharía 4096-bit. La única forma que AMD tiene para agregar más memoria es con memorias apiladas de 512MB, las cuales llegarán en una segunda etapa, la que maneja el fabricante Hynix para fines de año. Con esta segunda etapa se lograrían mayores densidades de chip, sin aumentar los módulos a más de 4 (manteniendo los 4096-bit para la R9 390X) y permitiendo versiones de tarjetas gráficas con 8 GB de memoria.

Algo similar ocurre con la R9 290X en sus versiones de 4 GB y 8 GB. En la primera se usan memorias en configuración de 256MBx16 a 32-bit y en la segunda 512MBx16 a 32-bit. Con ello se mantienen los 512-bit que posee este GPU.

Ahora, existe la posibilidad de que se logren 8 GB de memorias combinados. Esto sería 4 GB HBM y otros 4 GB en el PCB. Claro que con diferentes velocidades de funcionamiento, siendo los primeros 4 GB mucho más rápidos. Esto podría traer “ciertas” consecuencias a altas resoluciones, algo de lo cual NVIDIA podría hablarnos mucho. Pero esto último es mera especulación.

Fuente: Fudzilla