A más de un mes del lanzamiento oficial de los nuevos procesadores Ivy Bridge de Intel, Anandtech se adelanta con el primer review (“Preview” como le llaman ellos) del Core i7 3770K, el  que nos demuestra todo su potencial contra la variedad de CPUs de gama alta del mercado.

Ivy Bridge ya es oficial, por lo menos en el papel. Con su reciente retraso (que suena más a movimiento estratégico) para el 29 de abril, muchos se decepcionaron porque no verían los tan ansiados reviews y tendrían que esperar casi un mes más a la fecha original. El sitio Anandtech viene a calmar esas ansias y expectativas con el primer review oficial de la nueva serie de procesadores Ivy Bridge. El modelo probado es el 3770K tope de línea con 3,5 GHz de frecuencia stock y 3,9 GHz bajo turbo boost. El modelo es testeado frente a las demás familias de Intel y AMD, además su nuevo GPU HD 4000 es puesto a prueba versus soluciones gráficas integradas o de entrada. Sin más preámbulos un resumen de las pruebas, ya que si quieres ver más te dejamos invitados a leer el artículo completo en Anandtech.

 

Es impresionante ver como el nuevo CPU de Intel se posiciona por sobre el Core i7 3960x (Sandy bridge E), por lo menos en las pruebas más importantes del review, además de ver como se aleja entre un 5 a 15% por sobre el 2600K, su natural antecesor. Esto le da al 3770K un rendimiento por sobre lo esperado, quedando claro al verlo con números bastante más reales.
Por su parte el GPU HD 4000 es un excelente avance por sobre el HD 3000 a resoluciones de 1366 x 768 (justo para portátiles), pero sigue a la sombra del mejor GPU integrado de Llano.  En cuanto a consumo es lo que se esperaba, más bajo que la serie anterior y que es más bajo que los procesadores de 4 núcleos Sandy Bridge pero sin HT. Realmente muy bueno. Por último, la nueva versión de la tecnología QuickSync de Ivy Bridge da un tremendo salto de rendimiento al Transcodificar un vídeo en 720p un 40% más rápido que la versión anterior (Sandy bridge).

En conclusión tenemos una nueva arquitectura que es mucho más de lo que fue el paso de Conroe a Penryn (65nm a 45nm), ya que el paso de 32nm a 22nm se nos hace mucho más que una optimización de la arquitectura.